Respira profundo. Ya queda menos, te colocamos el arnés y el casco. Estás intranquilo, nervioso, nosotros seguimos a lo nuestro, colocándote el material, ya no queda nada para los segundos más emocionantes de tu vida.
Revisamos que todo este ok, pasas al otro lado de la barandilla, tu corazón late cada vez más rápido… Ya solo quedas tu y el vacío. Salta y descarga de adrenalina, ¿te lo vas a perder?